DTROIT: Donde la pasión encuentra ritmo
Patricio Cabezón (19), más conocido como Dtroit Khz, es un artista urbano emergente. Su camino en la música inició a sus 14 años bajo el nombre de “Duckzz”, sin embargo, empezó a innovar con distintos géneros, encontrando comodidad en el reggaetón. En sus letras plasma las emociones que pasan por su mente en el día a día. Actualmente es estudiante de periodismo en la PUCV y congenia su vida universitaria con su sueño.
AUDACES
Dagmar Gillibrand
3/17/20254 min read


Si bien días atrás había llovido, es un soleado viernes por la tarde en el campus Curauma. Bajando las escaleras para ir al baño antes de nuestra reunión, me encontré con él en el trayecto, quien me saludó cálidamente, añadiendo —entre risas— que había venido a la universidad solo por nuestra cita.
Me acompañó amablemente a imprimir mi cuestionario y, a pesar de que ya nos conocíamos antes de agendar la entrevista, frunció tímidamente el ceño para mencionar: “¿cuántas preguntas me harás?”.
Tomamos asiento en el cubículo 13 de la biblioteca. Lugar en el que posteriormente enviaron personal a pedirnos silencio, debido a que nuestras carcajadas resonaban en el pasillo.
-¿Cuál fue tu primer contacto con la música urbana?
-En un inicio, yo no escuchaba música urbana, siempre fui más de temas en inglés. Mis artistas favoritos eran Twenty One Pilots y The Weeknd. Al género me empecé a acercar con Bad Bunny, cuando estuvo en su mejor momento con canciones que fueron icónicas. La escena chilena la conocí durante la pandemia, cuando descubrí a Polimá WestCoast. Con él empecé a indagar y conocí a todos los demás.
-¿Cuál es la historia detrás de tu nombre artístico y a qué se debe el cambio de chapa?
-Al principio, estaba directamente relacionado con mi nombre de pila. Patricio, Pato, Duck. Las "Z" eran por darle estilo, porque a secas me parecía fome. Así seguí hasta 2020 o 2021, que fueron años bastante difíciles para mí. En 2022, decidí hacer un cambio en mi vida, así que comencé a buscar nuevos apodos, incluso cambié de look.
"Dtroit" surgió porque cuando era chico, mi papá iba a trabajar a un lugar llamado Astilleros Detroit, siempre me gustó, aunque no conocía nada sobre el lugar. El "Kilohertz" no es por la medida, se debe a que me hacía la sigla de mi apellido, "KBZ", ya que soy Cabezón. Así que junté varias ideas.
- ¿Cómo te quieres diferenciar de los demás músicos de la escena?
- Porque canto exactamente lo que siento y vivo. No suelo inventar historias ni pretender ser alguien que no soy. Me gusta demostrarlo en diferentes géneros que se ajusten a lo que hago.
- ¿Quiénes son tus mayores influencia
- Yo diría que Young Cister es una de mis influencias, últimamente Kidd Voodoo también. Si bien él se ha vuelto más comercial, siento que le da una cara distinta a lo que se lleva haciendo, ya que hoy en día muchos artistas cantan lo mismo. Además de ellos, DrefQuila ha sido una inspiración para mí desde hace años.
- Supe que conociste al “Poli”.
- Con Polimá ya es otro tipo de vínculo porque compartí con su familia. Nos conocimos el año pasado, él fue quien me acercó al género urbano chileno. He visto su evolución dentro de la música y es un artista al que le tengo mucho cariño. De Chile es mi favorito.
- Si uno de estos artistas famosos fuera consumidor de drogas y entregara un mensaje negativo a las personas. ¿Harías de todos modos una colaboración?
- Sí, si es por un tema, aceptaría. Ahora, si se tratara de una relación más cercana, ahí lo pensaría, porque no me gusta rodearme de personas que toman malas decisiones. Yo feliz aceptaría hacer una canción con cualquiera, pero a la hora de acercarnos más, pondría un límite, porque antes que todo somos personas.
Luego de preguntarle por colaboraciones pendientes, Patricio soltó una carcajada llena de ilusión al mencionar que yo soy una de ellas. Sus ojos brillantes transmitían una confianza demoledora y la entrevista se detuvo por unos segundos antes de retomarla.
- Sueles trabajar con tu productor Siko, sin embargo, hasta ahora tienes pocas colaboraciones en tu discografía. ¿Crees que hay compañerismo en la escena de Placilla?
- Siento que en Placilla hay compañerismo, aunque muchas veces no se concretan las cosas. Quizás faltan ganas reales para que sucedan. Con Siko fue una conexión muy rápida, como si hubiéramos sido amigos desde la infancia. Con él tuve suerte. Pero aquí en Placilla he tenido cercanos con quienes, con el tiempo, ya no existe contacto. Es fácil lanzar una idea y es difícil llevarla a la práctica. Hay apoyo, falta motivación.
- ¿Cómo fue tu experiencia en PartyCeo y en qué escenarios te proyectas?
- La verdad, tengo sentimientos encontrados con la organización. En el evento lo pasé increíble, sentí un día el sueño de vivir de la música. Hubo camarín y conocí a algunos famosos, fue una experiencia genial. No pensé que sucedería tan pronto.
Pensé que después del concierto iban a cambiar las cosas, pero en realidad no se dio de ese modo. Solo alcancé nueva gente, no di un gran salto. Igual era entendible, ya que fui como artista universitario, no como headliner. Pese a eso estoy agradecido, ya que aumenté mi personalidad y confianza.
- ¿Sientes que hay un real apoyo hacia los artistas emergentes en la región en cuanto a implementos, eventos o remuneración?
- Siento que podría haber más apoyo por parte de las municipalidades. Aquí en Placilla no se hacen muchos eventos y los que se hacen no son organizados por ellos, sino por grupos independientes. Por ejemplo, he cantado tres veces en la comuna y siempre ha sido por jóvenes que trabajan autogestionado.
Nunca he visto que las autoridades hagan algo, salvo en la Semana Placillana, cuando traen nombres grandes e invitan a algunos de la zona. Hasta donde sé, a los artistas locales los invitan, pero no les hablan de plata.
Un día después de nuestra entrevista se cumplieron 5 años del inicio de la carrera musical de Dtroit, quien está preparando dos estrenos propios y tiene pendiente dos colaboraciones. Todo en un proceso paulatino que le permita descansar de su reciente disco lanzado en mayo.
En una escena musical urbana en constante expansión, él representa una nueva generación de artistas que buscan diferenciarse a través de la autenticidad. Influenciado inicialmente por músicos anglosajones, su acercamiento al trap fue casi accidental, sin embargo, terminó siendo un espacio donde su pasión encuentra ritmo.