De la Escuela de Periodismo al "Para Ti": la historia del Blog de Elías
Elías Jil (23) es estudiante de quinto año de Periodismo en la PUCV, creador del “Blog de Elías” y actualmente está en su práctica profesional. Lo que partió como un experimento universitario en redes sociales se transformó en una comunidad fiel, gracias a su estilo cercano, humorístico y natural al entrevistar a estudiantes y transeúntes.
AUDACES
Fernanda Ojeda Castro
8/8/20254 min read


Una banca frente a la Escuela de Periodismo de la PUCV. Ese fue el lugar escogido para conversar con Elías, estudiante de quinto año, creador de contenido y la cara detrás del boom digital del “viral chileno favorito”. El mismo espacio donde suele entrevistar a sus propios compañeros con preguntas simples pero cargadas de identidad. Hoy, por una vez, es él quien responde.
Con una disposición generosa y mucha espontaneidad, Elías recuerda cómo comenzó todo, sin imaginar que su tarea universitaria se transformaría en una cuenta viral seguida por miles de personas. "Yo siempre decía que me gustaría hacer TikTok, hacer videos y cosas, pero nunca me atrevía", comenta, mientras se acomoda en la banca que bien podría ser su set habitual.
-¿Qué te motivó a comenzar a crear contenido en redes sociales y cómo describirías el tipo de contenido que haces hoy en día?
- Fue en una asignatura que se llama “Manejo y uso profesional de redes sociales”. Teníamos que crear una cuenta y hacer contenido, ir viendo las métricas… Se podía hacer en grupo o individual. Yo dije: ya, lo hago solo, como para desafiarme. Ahí hablaba de cultura pop, pero no chilena, sino más internacional: cosas de Disney, música, noticias. Pero después empecé a hacer preguntas acá, en la universidad. Pregunté por teleseries chilenas, artistas favoritos... y cuando terminó la asignatura, como me estaba yendo bien, decidí seguir con la cuenta.
Lo que partió como un ejercicio académico terminó convirtiéndose en una propuesta de contenido clara, aunque a veces indefinible para él. “Siempre tengo problemas para definirlo”, dice riendo. “Es como contenido entretenido, liviano… pero también trato de meterle cosas de identificación. Cosas chilenas. Y ahora intento que cada video venga con algún dato o algo que no sea solo lo chistoso”.
-¿Cómo nació la idea del “viral chileno favorito” y por qué crees que conectó tanto con la gente?
- Fue porque ya venía preguntando muchas cosas chilenas, como teleseries o artistas. Un día estábamos aquí mismo, en el hall de la escuela, y dije: ya, voy a preguntar por virales. Grabé a un compañero, subí el video, y se hizo viral. Creo que le fue bien porque todos nos sentimos identificados. Hay virales que incluso usamos en nuestro día a día, y a la gente le gusta documentar: comentan cuáles son sus favoritos y hasta se enojan si no aparecen. Hay virales que exigen que salgan. Cuando al fin aparecen, dicen: “¡al fin!”.
-¿Cómo ha sido el recibimiento del público y cómo ha influido en tu día a día?
-Me sorprende, la verdad, porque no he tenido tanto hate. Lo más fuerte fue cuando dije que no conocía un viral y me dijeron: “te haces el experto y no los conoces todos, deja de hacer videos”. Pero fue algo mínimo. Lo más icónico fue cuando fui a la moneda por el Día del Patrimonio. Estaba haciendo el tour y un guardia de palacio se me acerca y me dice: “¿Viral chileno?”... y siguió caminando. Me quedé en shock. También en la calle me dicen cosas como “a ver, viral chileno favorito”. Al principio no me lo tomaba con gracia, incluso una vez pensé en borrar la cuenta. Fue para el 18, en una fonda. dijeron que me parecía al “niño poeta”, y otra señora me dijo “¿tú eres el que pregunta viral chileno?”. Desde ahí ya lo asumí.
-¿Qué criterios sigues para elegir a quién entrevistar?
- Es súper espontáneo. A veces me dicen: “¿Cuándo me vas a preguntar?”, y ahí los grabo. Pero sí tengo cuidado con lo que publico. Si alguien dice un viral que puede ser muy funable, no lo subo. Hay que tener límites.
-¿De qué manera lo que has aprendido en la carrera de Periodismo ha influido en tu contenido?
-Me ha servido para procesar información. Ahora hago videos donde hablo de otras cosas, entonces trato de resumir y aplicar lo aprendido. También me ha ayudado la experiencia con trabajos prácticos en audiovisual. Me ha dado personalidad. Además, en esa asignatura aprendí a leer métricas y estadísticas, eso lo aplico siempre.
-¿Has hecho colaboraciones desde que empezaste?
-Solo con la Amandiz, otra creadora. Veía sus videos y una vez comenté en un live. Me dijo que iba a Viña, le hablé, nos juntamos y grabamos. Con ella hubo buena onda altiro. Después de eso también empezaron a llegar campañas. Al principio eran solo canjes, pero cuando llegué a 100 mil seguidores ya me empezaron a pagar y todo esto a solo un año de haber comenzado. He trabajado con una tarjeta, un mall, un supermercado… ¡Hasta me colé en la gala de Viña!
-¿Y la universidad? ¿Te ha apoyado de alguna forma?
- No he recibido apoyo como financiamiento, pero sí me han facilitado cosas. Una vez pedí usar pantalla verde y me dejaron grabar en el estudio. También hice un video durante el proceso de admisión, a mi estilo, y me invitaron a una entrevista del proyecto Cuvic. En ese sentido sí he sentido apoyo.
-¿Cuáles son tus metas a futuro, tanto en el periodismo como en la creación de contenido?
- Como periodista, me gustaría trabajar en televisión, me gusta mucho el área de cultura y espectáculos: la música, las películas. En cuanto a los videos, lo veo como un hobby, algo complementario. No creo que viva de esto, pero igual uno nunca sabe. Estoy tratando de incluir otros formatos, como entrevistas, pero sin perder lo chileno. Una persona una vez me dijo que sus redes estaban llenas de noticias trágicas, y que mis videos le daban un respiro. Entonces quiero seguir en esa línea: entretener, pero también entregar algo de información.
Ya terminando la entrevista, se nos ocurrió grabar un video al estilo de los suyos, para invitar a la gente a leer esta nota. En cámara, él me pregunta cuál es mi viral chileno favorito. Yo me río, respondo que hay muchos, pero le devuelvo la pregunta: “¿Y el tuyo?”. Elías está a punto de responder, pero lo interrumpo: “Mejor lean la entrevista en La Audacia para saberlo”.
Con esa misma chispa con la que responde en cámara, Elías sonríe. Su carisma y autenticidad son las mismas que lo hicieron destacar en redes y que hoy, desde una banca de la Escuela de Periodismo, lo posicionan como un nombre propio en la nueva generación de comunicadores.